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El SAS debe indemnizar a una paciente en Granada por un diagnóstico tardío de cáncer de mama

12 octubre 2022

GRANADA, 12 oct. (PRENSA EUROPA) –

El Consejo Consultivo de Andalucía ha fallado a favor del Servicio Andaluz de Salud (SAS) que indemniza con más de 15.000 euros a una paciente de Granada por un retraso en el diagnóstico de cáncer de mama debido a que tardó más de nueve meses en realizarse la mamografía que le recetaron y que tras la evolución de la enfermedad la obligó a extirparse una mama.

En su dictamen, al que ha tenido acceso Europa Press, el Consult analiza la petición realizada por esta paciente que pedía una indemnización de 143.771€, aludiendo a un retraso en el diagnóstico que a su juicio «influyó decisivamente» en la evolución de su cáncer porque entiende que si se hubiera sabido antes, se podría haber extirpado el tumor sin necesidad de extirpar la mama (mastectomía), como finalmente sucedió.

La paciente refiere que desde atención primaria le pidieron una mamografía el 13 de abril de 2016 y, sin embargo, recién se la hicieron nueve meses y 13 días después, el 26 de enero de 2017.

Agrega la agraviada que ni esa mamografía, ni la ecografía que le hicieron el mismo día, no le informaron ni le avisaron para que le hicieran la biopsia que le dijeron que le iban a hacer, pero eso fue varios meses después: “El 9 de junio 2017, cuando se realizó un nuevo estudio de mamografía, ecografía y biopsia, que arrojó el diagnóstico de cáncer de mama izquierda.

El Servicio Andaluz de Salud cree que, en realidad, «ha habido un retraso», y esto es resultado de los informes al expediente y del dictamen del médico adscrito al Servicio de Seguros y Riesgos.

El servicio de radiodiagnóstico del hospital Virgen de las Nieves de Granada afirmó que en este caso no concurrían circunstancias médicas para prescribir una mamografía, como pacientes con antecedentes familiares de cáncer de mama, factores de riesgo o que mostraran signos de sospecha en la exploración física – , así como que las lesiones mamarias son susceptibles de control evolutivo en seis meses, plazo considerado adecuado para que no se modifique el pronóstico y tratamiento de dicha patología, y en este caso, “este plazo fue inferior a seis meses”.

Con todo ello se podría concluir que «no se ha producido ningún daño», pero el Consejo Consultivo subraya que el dictamen del médico responsable del Servicio de Seguros y Riesgos indica que dicha mamografía «fue correctamente solicitada» y que «era urgente en naturaleza”, según el informe del médico general que atendió a la mujer. A ello añade que «existían estas otras circunstancias» como «alteraciones o signos de sospecha en el examen físico», según informa el médico de cabecera referente.

Por tanto, «la solicitud de mamografía fue correcta y, con independencia de que su realización fuera urgente o no, me parece excesivo que se realice más de nueve meses después de su indicación», advierte la Asesoría, que añade que si bien «no podrá siendo la fecha límite para la realización de mamografías no urgentes, no parece razonable que esto signifique su postergación indefinidamente”.

Por tanto, y pese a todo lo anterior, «no consta en el expediente que la evolución -del cáncer- hubiera sido necesariamente diferente si el procedimiento se hubiera realizado correctamente», ni considera razonable «concluir categóricamente que no tuvo influencia».

El Consultivo argumenta, por tanto, que «existe una responsabilidad patrimonial» y «aunque no se ha probado con certeza que el estadio evolutivo del tumor hubiera sido otro si se hubiera seguido un procedimiento asistencial adecuado» cree que «no hay perjuicio debido al mayor sufrimiento y dolor que se podría haber evitado si se hubiera brindado atención médica antes y de acuerdo a las circunstancias que presentó el paciente”.

Por ello concluye que al «daño personal básico» de la propuesta de resolución de la Administración -que indemniza únicamente los días de descanso- hay que sumar la cantidad de 15.000 euros, como daño moral, teniendo en cuenta que el el paciente tenía 44 años cuando comenzó el tratamiento el 13 de abril de 2016, objeto de la denuncia y actualmente tiene 50 años.