SEVILLA, 4 (PRENSA EUROPA)
El Programa de Sensibilización ‘Benzostopjuntos’ del Ministerio de Sanidad y Consumo para reducir el uso de tranquilizantes ha sido distinguido a nivel nacional como práctica segura de la Estrategia de Seguridad del Paciente del Sistema Nacional de Salud el buen uso de las benzodiazepinas, mejorar el conocimiento público de estos fármacos y reducir el adicción que generan.
A través de una intervención comunitaria multidisciplinar se pretende incidir en la reducción del uso crónico de benzodiazepinas (BZD). Este programa confirmó que la intervención es efectiva a los seis meses ya los dos años y que mejora la calidad de vida, opiniones y actitudes de los usuarios. Los responsables de este proyecto señalan que una suspensión previa del uso de benzodiazepinas y una mortalidad estimada inferior a 10 años predicen el abandono de los pacientes con uso crónico de BZD.
Tal y como se indica en una nota de prensa, la campaña «Benzostoptogether: Vivir sin tranquilizantes es posible» está dirigida a usuarios que usan benzodiazepinas de forma crónica para tratar la ansiedad y el insomnio. Durante las visitas que estos usuarios realicen a las consultas de atención primaria y farmacias comunitarias, los profesionales les ofrecerán material divulgativo y educativo con información sobre las benzodiazepinas, alternativas a su uso (técnicas de relajación, respiración y autocontrol, cambio de hábitos, ejercicios, etc.). .) y cómo desintoxicarse con la ayuda de profesionales.
Este material también incluye un test para medir el grado de dependencia de estos fármacos, así como un listado de guías de autoayuda para los trastornos de depresión y ansiedad del Servicio Andaluz de Salud y una pauta de sugerencias para el abandono. Es una adaptación local de uno que existe en salud en Canadá.
La distinción como práctica segura se realizó en las jornadas científicas celebradas, en el marco de la Estrategia de Seguridad del Paciente del Sistema Nacional de Salud, por el Ministerio de Sanidad y las Comunidades Autónomas en colaboración con la Sociedad Española para la Calidad Asistencial (SECA). ). En los últimos días se han sumado a la campaña mundial de la OMS para apoyar la seguridad del paciente como prioridad sanitaria mundial y con el lema “Medicamentos sin daño”.
Durante la jornada se presentaron las ocho buenas prácticas implantadas en los centros de salud de distintas comunidades autónomas para promover el uso seguro de los medicamentos. Estas prácticas recogen las líneas clave de la campaña “Drogas sin Daño”: transiciones sanitarias, pacientes crónicos multidrogas y uso seguro de medicamentos en situaciones de alto riesgo tanto en atención primaria como hospitalaria. Cada comunidad autónoma seleccionó un máximo de cuatro expedientes que fueron enviados a un comité científico multidisciplinar con experiencia en la materia. Se evaluaron 41 prácticas seguras según criterios establecidos.
OTROS PROYECTOS IMPULSADOS EN ANDALUCA
Desde Andalucía, además del programa “Benzostopjuntos”, se presentaron iniciativas del área de gestión sanitaria del Norte de Huelva, el distrito sanitario de Córdoba Guadalquivir y el hospital San Cecilio.
La experiencia del área de gestión sanitaria de Huelva Norte se ha centrado en la cancelación cautelar de tratamientos y su utilidad como herramienta para mejorar la seguridad del paciente. En concreto, se presentaron los resultados de la notificación de 597 denuncias, demostrando ser una herramienta ágil y precisa para la detección y corrección de problemas de seguridad.
Este proyecto amplía el proceso de toma de decisiones de los farmacéuticos de Primaria y Especialización, lo que supone una nueva dimensión en su trabajo.
En cuanto al proyecto del Distrito Sanitario Córdoba Guadalquivir, se presentó la “Estrategia multidisciplinar para la seguridad de los medicamentos”, que dio prioridad a la población con diez o más medicamentos durante seis meses o más, pacientes diabéticos mayores de 80 años o tratados con insulina y/o o antidiabéticos orales y pacientes que inician tratamiento con opioides menores o mayores para el dolor crónico no oncológico.
El objetivo de esta estrategia es reducir la carga farmacológica que puede no ser necesaria por la propia evolución de la enfermedad o por la no consecución de los resultados necesarios. El proyecto también incluye un cuestionario de evaluación de riesgos en la prescripción de opioides y la revisión de diabéticos mayores de 80 años.
Por su parte, el Hospital Universitario San Cecilio ha desarrollado el seguimiento de la trazabilidad clínica de los medicamentos administrados a los pacientes ingresados en el centro. Se realizó un análisis de eventos adversos relacionados con medicamentos y existe una clara necesidad de desarrollar un registro efectivo de medicamentos administrados, evaluando posibles deficiencias del sistema relacionadas con tareas, educación y capacitación, equipos y recursos y factores de comunicación.