Jesús Candel, el popular médico granadino conocido como Espíritu hombrefalleció este viernes a los 46 años tras fallar el cáncer de pulmón con las metástasis que padecía a partir de 2020, según informa el diario Ideal de Granada.
Candel se ha convertido en los dos últimos años, tras el anuncio de su enfermedad, en un referente de las protestas sanitarias en Granada, lideró la asociación «Justicia por la Salud» y creó una fundación donde tratar enfermos de cáncer a través del deporte en toda España. Siempre rodeado de polémica Como fue la cara visible de las protestas contra los recortes sanitarios en Andalucía durante el Gobierno del PSOE, en los últimos meses ha recurrido a las Unidades de Atención al Paciente Oncológico (UAPO) que se abrieron en Granada y Málaga.
Rodeado de polémica
Candel murió en Albolote (Granada). El médico anunció en 2020 que tenía una enfermedad avanzada con metástasis y en noviembre de 2021 tuvo una recaída. Su muerte marca el fin de un médico activista no exento de polémica y quién era clave para sacar a miles de personas a las calles de Andalucía en defensa de la salud pública.
En los últimos tiempos ha informado de su enfermedad, que atribuye al «estrés crónico» de sus años de lucha por la salud, y ha dado consejos para vencer al cáncer, defendiendo la importancia de la actitud de lucha o la alimentación y el ejercicio. Sus últimas apariciones en redes sociales demostraron lo avanzada que estaba su enfermedad y que su espíritu de lucha parecía intacto. No sin polémica, proclamando cosas como «Hasta Jesucristo tuvo cáncer» o dando consejos médicos sin el apoyo de la comunidad científica.
El médico saltó al escenario público de la mano del protestas de salud pública en Granada. Miles de personas salieron a las calles en una de las manifestaciones más multitudinarias que se recuerdan en esa provincia. Denunció la mala gestión de la servicio andaluz de salud (Sabes si se volvió viral por sus vídeos en 2016. Tras la marcha de Granada, se produjeron otras en Huelva o Sevilla, que fueron decisivas para el deterioro de la imagen del último gobierno socialista en Andalucía, con Susana Díaz al frente. Incluso el PSOE admite ahora que el deterioro de la sanidad pública, tras la crisis de 2008 y los recortes, fue determinante en su caída de la junta directiva.
Sus discursos fueron creciendo en tono hasta que caer en insultos y en 2019 se sentó en el banquillo por un delito de insultos contra el fiscal jefe de Granada. Posteriormente sería juzgado y condenado por el mismo delito contra Susana Díaz y altos funcionarios de salud por difamación en redes sociales.
Desde su Asociación de Justicia para la Salud, ‘Spiriman’ ha seguido denunciando el estado de salud andaluz incluso con el Gobierno de PP y Cs y ha mantenido intacta su legión de seguidores en las redes sociales mientras denunciaba «una privatización» del sector sanitario andaluz . Cuando fue azotado por el gobierno socialista, incluso aseguró que fue tentado por los partidos de la oposición para unirse al gobierno y trató de ser «fichado».