El desarrollo de los planes de vacunación vigentes y la importancia de continuar con el tamizaje de la inmunización frente al Covid y otros virus activos fue el pilar sobre el que se organizó el café editorial el pasado jueves en la sede de grupo alegre. El encuentro, organizado con la colaboración de modernosirvió para unir las diferentes perspectivas que comparten clínicos, directivos e industria sobre la situación actual de Andalucía y su futuro.
diego vargas, directora del Servicio Andaluz de Salud, ha explicado que “históricamente los sistemas de vacunación han sido una prioridad, como pilar y prueba de cohesión en un sistema justo y accesible”. A medida que avanzaba, la apuesta de la administración se reflejaba en los presupuestos, «que pasaban de una inversión de 54 millones de euros a 104 millones en el último presupuesto”. Para Vargas, «tenemos uno de los calendarios más completos del sistema de salud pública gracias al esfuerzo realizado no solo en la vacunación infantil, que ha sido un escenario clásico, sino también un gran esfuerzo en el programa de vacunación de adultos; en los procesos de pacientes con alta comorbilidad donde la vacunación interfiere de forma muy positiva en la prevención y mejora de la calidad de vida”. Por ello, analizó algunos resultados en varios ámbitos, como la vacunación antimeningocócica, la vacunación antigripal infantil, la vacunación infantil contra el VPH a partir de enero de 2023, la vacunación antineumocócica o la vacunación herpes zóster para grupos de riesgo.
“Este año estamos en números récord en una campaña dirigida a las personas mayores, superando ya el 60% de los mayores de 65 años, en un campaña conjunta de vacunación contra la gripe y el Covid para este grupo». Desde el comienzo de la pandemia se han administrado en Andalucía más de 20 millones de dosis de vacunas contra el Covid. “La vacunación se traduce en resultados de salud y estamos muy satisfecho con la implementación de esta campaña de vacunación sin perder de vista la colaboración pública y privada en su ejecución. Seguiremos trabajando para ampliar el cronograma en función de la evidencia, los estudios de eficacia y los criterios del Comité Asesor de Vacunas”.
Por su parte, david moreno, director del Plan Estratégico de Vacunación de la Junta de Andalucía, destacó la favorable predisposición a la vacunación tanto de los profesionales como de la población. “Además de la neumonía, hay mucha variedad de enfermedades respiratorias por diferentes virus y bacterias”, explicó, haciendo hincapié en la extensión de las enfermedades respiratorias, que se reveló con la prevención de la neumonía gracias a la vacunación Covid-19. El experto destacó el trabajo de investigación actual y los sistemas de salud para promover la prevención no solo reduciendo la mortalidad, sino también el impacto en la calidad de vida de las personas hospitalizadas. “Hemos visto su efecto en los picos de incidencia, que a veces ejercen presión sobre el pregunta sobre sistemas de salud. Si hay una medida clave en este sentido son las vacunas”, añadió.
También agradeció la gran implicación de la población. “Inicialmente las previsiones se estimaban en un 60% en la vacunación contra el Covid y tiempo después se alcanzaban casi todas gracias a la probada eficacia de las vacunas para evitar hospitalizaciones”. Según datos facilitados por Moreno, el año pasado la vacuna contra la Covid-19 llegó al 98% de los mayores de 70 años y al 90% de la población de entre 60 y 65 años. Con un total a la fecha de 1,1 millones, la dosis de refuerzo de este otoño alcanzó el 67 % de los mayores de 80 años y el 63 % de los mayores de 65 años. “El impacto de las siguientes olas de Covid será menor gracias a lo que hemos logrado en este período. Seguimos haciendo vacunación estacional en el futuro y seguiremos destacando a la población de riesgo”, subrayó.
Por su parte, la Dra. Alfonso Carmona, presidente del Colegio de Médicos de Sevilla y fundador del Grupo IHP, explicó cómo “la pandemia ha aumentado la confianza en las vacunas”. “La prevención es la mejor herramienta, las vacunas son la clave de la prevención y no debemos bajar la guardia”, dijo. Además, destacó la papel de los pediatras como grandes artífices de la mejora de las vacunas y defendió el compromiso de Andavac por «hacer las cosas bien y con calidad».
Sobre la importancia de la vacunación en los distintos grupos de edad, Carmona consideró que «la enfermedad no tiene edad» y subrayó que los pediatras «aunque veamos niños, debemos insistir con los mayores cuando les hablamos y fomentar el cumplimiento de los programas. Finalmente, quiso aludir a la innovación que el vacunas de ARN mensajero para dar respuesta y aportar soluciones a las enfermedades que conocemos. “Tenemos que agradecer a la industria farmacéutica por su trabajo de investigación y el progreso que ha tenido en la pandemia”, dijo.
el medico antonio lemes, jefe del Servicio de Medicina Intensiva de la AGS Sur de Sevilla, abordó el impacto de la vacuna en las hospitalizaciones por Covid. “En estos momentos hay 17 pacientes hospitalizados en la UCIS andaluza. Venimos de un trabajo que comenzó en marzo de 2020 donde trabajaron 34 UCIS de manera coordinada involucrando a 55 hospitales públicos y privados. Antes de la llegada de las vacunas había 750 pacientes simultáneos en las unidades de cuidados intensivos de Andalucía”. “Llegaron a cuidados intensivos el 12% de los pacientes ingresados en el hospital y en toda mi experiencia de 44 años en la UCI, nunca había visto una enfermedad con una mortalidad tan alta”, explicó con base en su perspectiva histórica.
“En enero de 2021, aún sin tener vacunas, había 640 pacientes intubados con ventilación mecánica. Se logró atender a todos los pacientes triplicando la capacidad de las camas UCIS. A octubre de 2021, con una parte de la población vacunada, todavía teníamos hospitalizaciones de pacientes no vacunados. Un mes después, el número de pacientes hospitalizados que requerían cuidados intensivos se redujo drásticamente al 2 o 3%. En enero de 2022, la mitad de las personas hospitalizadas ya no estaban vacunadas”, explicó. “Las vacunas han sido una herramienta extremadamente útiltanto el Covid-19 como otras patologías infecciosas de la historia, como la poliomielitis o la viruela”, resumió.
Al final, Juan Carlos Gil, director general de Moderna para España y Portugal, destacó el esfuerzo de la compañía, con 11 años de trabajo de investigación a sus espaldas y 6 años de trabajo con otros coronavirus. Gil coincidió en que «históricamente los profesionales de la salud han hecho un trabajo encomiable en el cumplimiento de las coberturas de vacunación», y esto “Andalucía es un ejemplo a seguir en cuanto al plan de vacunación y los profesionales implicados”.
Sobre el papel estratégico de nuestro país para la compañía, ha subrayado que “España es un país clave para Moderna y tenemos una inversión importante a través de una colaboración a largo plazo para producir las vacunas de ARNm de Moderna con Rovi”. Además, especialmente en Andalucía, la colaboración con Rovi es ejemplar Efectivamente, desde Granada estamos sirviendo la vacuna contra el coronavirus en más de 70 países”, ha subrayado.
Moderna está invirtiendo más de 500 millones de euros en España en 2022. Por un lado, en su alianza con la farmacéutica española Rovi para producir su vacuna actualizada contra las nuevas variantes del covid en Madrid y Granada y, por otro, en la construcción, en la Comunidad de Madrid, de un laboratorio de pruebas de calidad para sus vacunas de ARN mensajero, que se espera que esté operativo en 2023.
El ARN mensajero, una apuesta de futuro
La tecnología de ARNm de Moderna consigue proporcionar información a las células para que sean ellas mismas las que fabriquen la proteína viral para que el propio organismo genere una respuesta inmunitaria frente al patógeno, es decir, cuando el virus intente atacar a nuestro organismo, éste podrá defenderse porque, previamente , ya hemos generado una respuesta inmune contra ese antígeno. La plataforma de mensajería de ARN de Moderna tiene la gran ventaja y flexibilidad de poder producir diferentes vacunas en las mismas instalaciones, con la misma tecnología y el mismo equipo.
Durante más de una década, la empresa ha trabajado en la investigación y producción de diversos fármacos a través de su plataforma de ARNm. Como ha señalado Juan Carlos Gil, “es esta misma tecnología y su amplio conocimiento la que les permite una gran flexibilidad y agilidad a la hora de crear y entregar soluciones eficaces en tiempo récord para luchar, ahora y en el futuro, contra las enfermedades que actualmente no tienen opción terapéutica, al igual que ha permitido adaptar la actual vacuna contra la Covid-19 para incorporar muy rápidamente la variante omicron”.
Además de la vacuna contra el coronavirus, Moderna tiene un programa de desarrollo continuo a través de su plataforma que incluye vacunas para el gripe, RSV, VIH, citomegalovirus, enfermedades raras y autoinmunes y la vacuna personalizada contra el cáncer.
La compañía se ha comprometido con la OMS a iniciar ensayos clínicos para 2025 para las enfermedades que la OMS considera que representan el mayor riesgo para la salud pública mundial, incluidas la malaria y la tuberculosis. Todos aquellos patógenos que tienen potencial pandémico y en los que llevan muchos años intentando desarrollar una vacuna hasta la fecha sin éxito. “En Moderna estamos muy involucrados no solo con la vacunación, sino también con la salud de las personas. Lo que queremos conseguir es que la vacunación y las soluciones terapéuticas que pondremos sobre la mesa se incorporen al vida diaria de las personas (niños, adultos y ancianos) como un sistema de prevención”, explicó Juan Carlos Gil.